Mientras que una sauna es predominantemente un calor seco a alta temperatura, un baño de vapor se mantiene a una temperatura más baja pero con una humedad de casi el 100%. El bañista es envuelto y acariciado por espesas nubes de vapor que se arremolinan alrededor de la sala de vapor o ducha de vapor y el generador de vapor de la sauna es el dispositivo que produce ese vapor.